En el sector de las asesorías, la confianza es uno de los principales activos. Ya se trate de asesoría fiscal, laboral, contable o jurídica, los clientes esperan profesionalidad, discreción, eficacia y un trato cercano. En la era digital, esa confianza comienza muchas veces en internet. Por eso, gestionar adecuadamente la reputación online de una asesoría es fundamental para atraer nuevos clientes y fidelizar a los actuales. En un artículo anterior nos centramos en la promoción en internet de una asesoría, también abordamos la aparición de una asesoría en las redes sociales, así que ahora complementamos los anteriores artículos centrándonos en la reputación.
¿Qué es la reputación online?
La reputación online es el conjunto de opiniones, comentarios y percepciones que los usuarios tienen sobre una empresa en internet. Se forma a partir de lo que la propia asesoría publica en sus canales (web, redes sociales, blogs), pero sobre todo de lo que terceros dicen: reseñas en Google, comentarios en foros, valoraciones en redes sociales, etc.
Una buena reputación online actúa como carta de presentación, mientras que una mala puede alejar a potenciales clientes antes siquiera de contactar.
1. Controla lo que aparece cuando buscan tu nombre
El primer paso es hacer una búsqueda de tu asesoría en Google y ver qué aparece. La ficha de Google Business, las reseñas, la página web y los directorios profesionales son los primeros elementos que influirán en la percepción del usuario.
Consejo: reclama y optimiza tu ficha de Google Business. Asegúrate de que la información esté actualizada: horarios, teléfono, dirección, servicios… Añade fotos del equipo, de la oficina y responde a todas las reseñas (tanto positivas como negativas).
2. Fomenta las reseñas positivas
Las opiniones de otros clientes son uno de los factores de decisión más potentes en internet. Si tus clientes están satisfechos, anímales a dejar una reseña en Google o en otros portales relevantes como LinkedIn, Facebook o plataformas específicas del sector.
Importante: nunca compres reseñas ni las escribas tú mismo desde cuentas falsas. Los usuarios y los algoritmos lo detectan y puede ser contraproducente.
Truco ético: tras una gestión especialmente satisfactoria (por ejemplo, resolver una inspección o conseguir una bonificación importante), puedes pedir amablemente al cliente que comparta su experiencia.
3. Atiende las críticas con elegancia
Ninguna empresa está libre de una reseña negativa. Lo importante es cómo se responde. Ignorar una crítica o responder con hostilidad solo empeora la imagen pública.
Cómo actuar ante una crítica negativa:
- Agradece el comentario.
- Pide disculpas si corresponde.
- Explica brevemente tu versión de los hechos sin entrar en discusión.
- Ofrece una solución o invitación al diálogo privado.
Este tipo de respuestas transmiten profesionalidad, empatía y transparencia, cualidades muy valoradas en una asesoría.
4. Crea contenido de valor para posicionarte como experto
Publicar contenido útil y original no solo mejora tu SEO, sino que refuerza tu autoridad como profesional. Puedes escribir artículos en tu blog sobre novedades fiscales, consejos para autónomos, explicaciones de trámites complejos, etc.
También puedes compartir estos contenidos en tus redes sociales o enviarlos por correo a tu base de datos de clientes.
Ventaja extra: si generas contenido útil, es más probable que otros lo compartan, lo que contribuye a mejorar tu imagen y visibilidad online.
5. Mantén una presencia activa (y coherente) en redes sociales
No hace falta estar en todas las redes sociales, pero sí en las que realmente usan tus clientes. Para una asesoría, LinkedIn es esencial; Facebook también puede ser útil para llegar a pymes y autónomos locales.
Recomendaciones:
- Publica con regularidad, aunque sea una vez por semana.
- Cuida el tono: profesional, cercano, claro.
- Comparte contenido propio y también noticias o consejos del sector.
- Interactúa con seguidores y responde dudas cuando sea posible.
6. Monitoriza lo que se dice sobre tu asesoría
Existen herramientas que permiten rastrear menciones en la red, como Google Alerts. Activarlas para el nombre de tu asesoría (y el de los socios si son públicos) te permite reaccionar rápidamente ante cualquier comentario o noticia.
7. Cuida la experiencia del cliente también fuera de internet
La mejor forma de tener buena reputación online es dar un buen servicio offline. Un cliente satisfecho es un embajador natural de tu marca. Asegúrate de que todos los miembros del equipo ofrecen un trato correcto, atienden con agilidad y mantienen la calidad del servicio en todo momento.
Gestionar la reputación online no es un trabajo de un día, sino una estrategia constante de escucha activa, transparencia y creación de valor. Para una asesoría, donde la confianza es clave, invertir en buena reputación digital se traduce en más clientes, mejor imagen de marca y una ventaja competitiva sólida.